20 . SEPTIEMBRE . 2003 . Sábado.
FROMISTA . A
las siete de la mañana ya estoy despierto gracias al barullo que arma el
personal para recoger sus cosas. Media hora más tarde irrumpe en el dormitorio
un tipo preguntando a ver quién no ha desayunado. Ese soy yo, el único que
sigue en la cama. Así que me levanto cansinamente y desayuno. Recojo las cosas,
ato las alforjas y me dirijo, frío y soñoliento y con la cara sin lavar, a la
plaza del pueblo. Allí me observa y bendice San Telmo y unas ranas de bronce
hacen gorgoritos sobre unas bolas de piedra. Escribo en el cuaderno. Es ya
tarde y aún hace fresco. ¿Qué coño estoy haciendo? Esta vida castrense y
espartana me va a matar.
Esta fotillo la he encontrado en el Google |
Comienzo a pedalear, con rumbo equivocado.
Me doy cuenta cuando llevo cinco kilómetros, pero decido continuar hasta
OSORNO. Llegando a OSORNO pincho una rueda. La trasera. Desarmo las alforjas,
desarmo la rueda, descubro un alambre, arreglo el pinchazo, monto la rueda y
monto las alforjas. Vuelvo al camino.
Al momento la rueda está en el suelo.
Desarmo las alforjas, desarmo la rueda, cambio el parche (solo le había puesto
pegamento por un lado) Monto la rueda. Monto las alforjas.
La rueda en el suelo otra vez. Desarmo
alforjas, desarmo rueda, localizo nuevo agujero. Pongo parche. Coloco cámara
nueva y guardo la reparada, monto rueda, monto alforjas.
Hasta las narices de tanto pinchazo |
En una tienda de OSORNO compro un peine,
maquinillas de afeitar y un cortaúñas. La mujer es agradable, con aires de
solterona antigua. Reconoce mi lejano acento cántabro. En el pueblo hay una
boda y yo mientras estoy cambiándome de pantalones a cincuenta metros.
Por fin, sobre la una de la tarde me pongo
en camino. He perdido mucho tiempo con tanto pinchazo. Pedaleo a toda caña
hacia CARRION DE LOS CONDES. Llego a CARRION pasadas las dos. Telefoneo a Olga
y quedamos. Nos encontramos a las tres, cuando estoy sellando la credencial.
Con ella viene Alain. Vamos a tomar algo y luego a comer.
Impresionantes relieves en la Iglesia de Carrión de los Condes |
Después
nos vamos a bañar al río Carrión. En el coche de Olga echamos la bici y las
alforjas. En el río pasamos un buen rato, pero no hay baño. Hace algo de aire,
además no tenemos bañador y por allí hay gente. Unos jinetes llegan a darle de
beber a sus caballos. Luego nos movemos los tres a FROMISTA. Visitamos la Iglesia y nos tomamos
algo. Pasamos por la bollería y tomamos latas de cerveza, otra vez bajo la
atenta mirada de San Telmo.
Alain intentando montar en mi bicicleta |
No más fotos, por favor |
Olga toma un baño sumergiéndose hasta los tobillos... |
... y de paso aprovecha para sacarse la roña de las rodillas |
Me dejan de nuevo en VILLALCAZAR DE LA SIRGA , donde sello y me
quedo a dormir. Por más que lo intento no consigo conciliar el sueño. Le doy
vueltas en mi cabeza a los acontecimientos del día, al viaje y a mi vida en
general.
Noche
de insomnio.
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